El Maquillaje Para Labios
Nuestros labios tienden a ser pasados por alto a la hora de mimarlos, es por eso que debemos utilizar los productos adecuados para que puedan verse realmente sensuales.
Hay dos métodos para utilizar un maquillaje para labios:
El primero es muy dramático y proyecta una imagen fuerte, es recomendado usarlo para fiestas
El segundo es más sensual y romántico aplicando un brillo labial color rosa o durazno, ambos colores representan la juventud
Los labios, esa parte sexy del cuerpo, pueden jugar a tu favor o muy en tu contra. Lograr unos labios que animen a ser besados no es tan complejo si se tiene algo de conocimiento. El brillo, el color, la textura, son fundamentales para que esta parte de tu cara se lleve todas las miradas.
Labios Gruesos
Perfila el contorno por debajo del borde
natural de los labios. Si lo que quieres es disimular tu grosor, no utilices nunca colores demasiado brillantes.
Labios finos
Perfila el contorno por encima del borde natural, forzando levemente su anchura con tonos más
claros y brillantes.
Labios desiguales
Tapa con el maquillaje claro todo el labio y perfila rectificando sobre uno de los labios hasta conseguir la simetría deseada; si es demasiado grueso se hará más fino, y viceversa
Labios caidos
Disimula las comisuras con un maquillaje de fondo más claro que el utilizado para el cutis. Haz un
trazo normal en el corazón del labio superior, extiéndelo hacia la comisura y acábalo 1mm antes
de llegar a esta. Perfila el labio inferior y alarga el trazo hasta que se junte con el superior.
Labios sensuales
Aplica una base de maquillaje o corrector sobre ellos. Esto borra su forma para rediseñarlos después.
Perfila el contorno de los labios, ligeramente por encima de tu línea natural, comenzando por el centro hacia fuera.
Aplica el color (mejor con un pincel) por el interior de la forma perfilada y sécalos presionando con un pañuelo de papel.
Repasa de nuevo el color con la barra de labios.
Exfolia tus labios!!!
Con un poco de miel, vaselina y azúcar
Aplica la mezcla en los labios con un suave masaje durante un par de minutos y la deja actuar durante unos cinco minutos más.
Pasado este tiempo con una toalla húmeda retira todos los restos y listo!!!
Los labios se quedan súper suaves, sin pielecillas y además, hidratados, gracias a las propiedades de la miel.
